Perelló considera un disparate comunicación en La Romana; abundan analfabetos, delincuentes, agresores sexuales y relacionados con el bajo mundo

En un artículo que publica en su columna, el periodista Julio Perelló consideró que el ejercio de la comunicación en La Romana "es un disparate" y "una vergüenza", ante la mirada indiferente de las autoridades competentes.

Por Julio Perelló/OPINIÓN ITINERANTE/

LA ROMANA, República Dominicana.-Tomando un poco del periodista venezolano Antonio Pisano Bartolomeo -sirve a los intereses del gobierno de Hugo Chávez- sobre la teoría de los que es un COMUNICADOR SOCIAL y lo que de una manera u otra viene a significar la LIBERTAD DE EXPRESIÓN.

En teoría debería ser un profesional con la obligación de proveer a la sociedad de una información oportuna y veraz, de manera que sea un recurso útil para el desarrollo de los ciudadanos y el pleno ejercicio de sus derechos.

El comunicador social debe tener como norma irrenunciable, LAVERDAD, ya que fuera de esta se convierte automáticamente en un ser que ejerce la profesión del periodismo sin escrúpulos.

De igual manera, los comunicadores sociales, ante la ley, son considerados personas naturales y responsables por los hechos que se desprendan del ejercicio y función de su labor.

La comunicación social en La Romana es un disparate y por consiguiente una verguenza. Todo el que se engancha con una camarita en las manos, que monta un programa de radio y televisión, se hace llamar COMUNICADOR, en otro dislate gramatical.

Todos somos comunicadores. Ejercemos la función natural, otorgada por el SER SUPREMO de comunicarnos entre sí a través de distintos mecanismos. Palabra hablada, escrita o por señales. Los animales son comunicadores, pues ellos se comunican en lo que es su habitad cotidiano.

Ahora bien, cuando se trata del periodismo, entonces, solemos utilizar las palabras de COMUNICADOR SOCIAL.

Ahora bien..Debemos seguir llamando comunicadores sociales a este grupo de analfabetos funcionales que han invadido nuestros medios con el más increíble desparpajo y cometiendo toda clase de tropelías en detrimento de la población y en el aprovechamiento personal. ¿quién me puede brindar una respuesta?.

Con profunda pena e indignación he visto los más recientes escarceos que se han producido en torno a denominados comunicadores sociales y sobre todo en la muestra y divulgación de expedientes judiciales que tienen algunos de éstos. Casos pendientes que han permanecido archivados y que por razones de conveniencias varias hayan salido a flote.

¿De quién es la responsabilidad del archivo de expedientes ante la comisión del delito?. La auténtica responsabilidad recae sobre quienes tienen el deber y obligación de dar curso, en el marco de la legalidad sobre el que ha incurrido en la violación de la ley.

Esa connivencia de la justicia con el agresor de las leyes tiene muchas aristas por donde cortar. ¿ a otros ciudadanos se les trata igual, particularmente aquellos que no tienen brazos para alcanzar los tentáculos del tráfico de influencias?

Obviamente no. Y se dice que la ley es para todos. En el caso de comunicadores que han cometido acciones delictuosas se han tratado con el paño de la impunidad. Mientras los ojos de la población observa y clama al cielo, aunque de manera particular aquellos ciudadanos que han sido afectados por las acciones vándalicas de los llamados comunicadores sociales.

Sí, porque en La Romana cohabitan en medios de comunicación toda una claque de delincuentes. Los que se enriquecen de manera ílicita, los agresores sexuales, los chantajistas, los que tienen bandas de delincuentes a su servicio, los que tienen contactos con el bajo mundo y de eso las autoridades judiciales tienen el pleno conocimiento y se hacen de la vista gorda.

Entonces. ¿POR QUÉ LA JUSTICIA NO ACTÚA PARA CREAR LOS ESPACIOS NECESARIOS DE UNA SOCIEDAD DE COMUNICADORES SOCIALES QUE SE ENMARQUE A LOS DICTADOS DE ESTA NOBLE PROFESIÓN?
franklincorderop@hotmail.es



Imprimir artículo