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OPINIÓN))Comunicadores o mentirosos patológicos

Por Julio Perelló/OPINIÓN ITINERANTE/

LA ROMANA, República Dominicana.-No soy Santo de devoción de muchos de los que ejercemos este oficio u profesión, debido a que piensan que he venido como intruso a usurpar funciones que en un aparente patrimonio les pertenece.


Primero, repiten que no soy de La Romana. Obviamente, sólo por venir de los Estados Unidos y emprender la acción de quedarme a trabajar y desarrollar lo que hasta ahora he venido haciendo. Segundo, por mantener criterios de independencia en aspectos nodales del ejercicio. Pero sobre todo, tratar de ser objetivo y veraz en el comentario o la divulgación de la informacion.

Es por ello que se me revoltea el estómago de las náuseas cuando escucho a determinados personajes de la comunicación, hablar de manera pública y privada de personas que tienen el peso real de los cuestionamientos. Incluso, en acciones comprobadas y que de repente, por una acción que nadie sabe, se despachan en comentar bondades y virtudes.

Cómo operan cambios en sus comportamientos y cómo piensan que el resto de la población que les ve y les escucha está aceptando sus patrañas, plagadas de argumentos que parecen tener los dictados del diablo.

Ver y escuchar cómo usan el nombre de Dios, cómo blasfeman ante la Palabra de Dios, cómo mienten con la Palabra de Dios. Pero por Dios!!.

No tengo valor para digerir todo ese mundo de iniquidades. Y sé que con esto me gano más los criterios de la animadversión. Dios mío, cómo mienten, cómo se vuelven cómplices de las atrocidades, de las vagabunderías, cómo cargan el alma de partículas miserables para vender una falsa seriedad.

Pero nada. Marineros somos y el mar andamos. Ojalá que antes de anclar hayan hecho actos de reflexión en la conducción del bote de la vida en lo terrenal, porque a Dios nadie lo engaña..

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