Mientras su hijo muere lentamente de cáncer, Enrique Martínez y la Lotería Nacional no le cumplen con entrega de dinero
Por Shira Abreu/SANTO DOMINGO, República Dominicana.-“A Dahian antes le decían el gordo, ahora no pesa 80 libras”, dijo con lágrimas en los ojos y una tristeza que le marchitaba la voz Doris Reyita Rivera, la madre de un muchacho de 19 años que sufre de un cáncer en la cara que cada día le acorta la vida.
La pesadilla de la familia Lara Rivera comenzó en agosto del 2009 cuando los médicos diagnosticaron un cáncer maxilar en el lado izquierdo de la cara de Dahian Esteban, un destacado estudiante que sueña con ser médico.
No obstante, su madre se mantiene aferrada a la esperanza de que por fin puedan completar un tratamiento de quimioterapias que requiere para poder operarlo.El tumor no para de crecer. Hoy está tan grande que le ha desfigurado la cara y le mantiene sumergido en una depresión que hasta le ha quitado las esperanzas de vivir.
Pero se ha enfrentado a que la carta que le entregó la Lotería Nacional donde se comprometía a pagar las sesiones no le sirve para nada.
El doctor Enrique Martínez, administrador de la Lotería Nacional.
La comunicación del 13 de octubre de 2009 firmada por el administrador general de la Lotería, Enrique Martínez, dice que esa entidad se comprometía a pagar 47 mil 240 pesos por seis quimioterapias en el Instituto de Oncología Doctor Heriberto Pieter, más 13 mil 240 para la compra de medicamentos. Dinero que según le dicen en el Oncológico todavía no han recibido.
La madre relató en visita a la redacción de El Nacional que de esas seis sesiones le han aplicado tres a Dahian, pero que en el hospital le dicen que la Lotería no ha hecho el desembolso por lo que la deuda queda a nombre de la familia.
La importancia de las terapias restantes radica en que son estrictamente necesarias para tratar de que disminuya la hinchazón de la cara de Dahian y se pueda operar.
Operación
Luego de tocar muchas puertas, Doris logró que el Despacho de la Primera Dama se comprometiera a pagar la operación de extirpación del tumor. La cirugía se pautó para finales de enero, pero luego de que Dahian llevaba varios días recluido en la clínica Corazones Unidos, los médicos decidieron no operarlo porque la cara estaba muy inflamada, por lo que ordenaron más quimioterapias.
Mientras esperan que la Lotería pague las quimioterapias, Dahian se mantiene en cama en su casa de Sabana Perdida, comiendo sólo líquidos en biberón que su madre le da por un pequeño hueco que le queda libre de tumor en la boca.
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