OPINIÓN))Perelló cree un error de Ricardo Bello permitir comparsa de "pájaros" en carnaval La Romana
Ricardo Bello en el carnaval
Ricardo Bello...pensé que pensabas
Por Julio Perelló/OPINIÓN ITINERANTE
(Fotos/cortesía Tripeord.com) LA ROMANA, República Dominicana.-Sin lugar a dudas, Ricardo Bello ha calado en el sentimiento del pueblo romanense, en una acción un tanto díficil de explicar. Sus ideas y su accionar de trabajo le han servido de plataforma para conquistar esos espacios de favoritismo que le ha dado nuestra población. Sus logros están ahí, no es necesario hacer mención de ellos.
Ahora bien...Lo ocurrido en el más reciente denominado FESTIVAL CARNAVALERO, le quita ante mis ojos un alto porcentaje de los frutos positivos que ha logrado cosechar. Ricardo Bello no puso los ojos y oídos en el corazón de la familia romanense, que en su gran mayoría pedía la realización de esa actividad en el marco ideal del encuentro con las tradiciones, la cultura y la alegría sana.
Pero no fue así. Ricardo Bello y su equipo le dieron una bofetada o, porque no decirlo, una puñalada a los sentimientos de apoyo que se le había ofertado al carnaval en medio de las renuentes posiciones de los grupos religiosos y conservadores de la sociedad local.
Lo que aconteció el domingo 28 de febrero en nuestras calles fue una burla, vulgar, asquerosa y llena de vergüenza, que pone manifiesto que es necesario darle riendas sueltas a las pasiones ocultas, aprovechando cualquier tipo de coyuntura.
Cómo demonios, Ricardo Bello y su grupo, podemos enfrentar a través de los medios de comunicación a los que se oponen a los carnavales, cuando ustedes han pisoteado de manera sensible los sentimientos de apoyo brindado.
Cómo diablos, Ricardo Bello y su grupo, podemos sentirnos alegres, cuando se llevó tristeza al alma, al ver que frente a nuestras narices se pavoneaban de manera orgulllosa y triunfante las comparsas de homosexuales que ustedes le dieron cabida.
No y no, Ricardo Bello y su grupo, desde ahora en adelante nos tendrá de frente y volcaremos nuestros esfuerzos a rechazar de plano las actividades carnavalescas, si no se hace una especie de mea culpa ante el acto de vergüenza que ustedes nos brindaron.
Para qué diablos se hace hincapie en las tradiciones y la cultura. Para qué diablos se trae al profesor Dagoberto Tejeda para hablar de cultura y tradiciones, cuando ustedes lo que presentaron fue lo inverso.
La denominada muestra carnavalesca tuvo de todo, menos cultura y tradición. Sólo un asqueroso espectáculo de un grupo de degenerados, hijos del diablo, dispuestos a fomentar que la inversíón de valores es lo que debe primar en el seno de la sociedad.
Al Comité Organizador del Carnaval de La Romana, mi aplauso y sobre todo saber que no necesitan caretas para mostrar sus instintos aberrantes.
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