Procuran explotar riqueza turística
Yuma aboga por más oportunidades
Por Franklin Cordero / El Caribe
SAN RAFAEL DE YUMA. Este municipio de la provincia La Altagracia lucha por un objetivo: conseguir que el Congreso incluya a Boca de Yuma en la reforma de la ley de áreas protegidas para que se puedan ejecutar proyectos turísticos que acaben con el desempleo.
San Rafael del Yuma no vive ya de la agricultura y su distrito Boca de Yuma, con riquezas históricas y costeras, sólo depende de una actividad pesquera reducida a 95 por ciento, según el presidente de la Asociación de Pescadores, Alfonso Bernard.
“Nuestra juventud se nos va. Los jóvenes son presa fácil de las drogas y la corrupción”, lamenta el líder religioso Ulises Ubiera.
Pero estas comunidades no se han cruzado de brazos. Efectuaron dos encuentros públicos con las autoridades municipales, del Gobierno y legislativas, quienes reconocen la necesidad de oportunidades y se han comprometido con aliarse a la causa.
Desde ya trabajan contra el reloj, pues si se aprueba el proyecto de reforma constitucional, sometido por el Ejecutivo, habría que esperar una nueva modificación de la Carta Magna.
“Ese proyecto establece dejar las áreas protegidas como están; necesitamos que nos incluyan en la modificación de la ley que se mueve en el Congreso”, sostiene Jorge Monteagudo, presidente del Comité para el Desarrollo de Boca de Yuma.
Hasta hace poco la situación era distinta. Todo cambió desde que se aprobó La ley 202-04, que modifica la 64-00 sobre Áreas Protegidas, la cual establece límites que ubica parte del poblado de Boca de Yuma dentro de la superficie del Parque Nacional del Este.
Al respecto, el historiador y empresario televisivo yumero, Néstor Julio Castillo, señala que esta segregación de parcelas favoreció a proyectos en Bayahíbe y perjudicó a Boca de Yuma, basado en que los legisladores de entonces prefirieron extender la superficie del Parque del Este hacia un vasto territorio de esa comunidad.
De hecho, 375,638 metros cuadrados del poblado, que abarca incluso hasta el área del liceo y el cementerio, forman parte de la zona protegida.
El apoyo de funcionarios
Sobre la crisis por la debacle en la producción agrícola y pesquera, las autoridades municipales, gubernamentales y legislativas reconocieron que la única salvación radica en que se le abra las puertas a la inversión turística.
Entre esos funcionarios figuran el síndico, Oscar Espinal; el gobernador de La Altagracia, Rafael Cedeño; el senador Germán Castro y los diputados Ricardo Sánchez, Guido Cabrera y Juan Julio Campos, y el representante de Turismo, Franklin René Berroa.
franklincorderop1@hotmail.com; franklincorderop@hotmail.es
Yuma aboga por más oportunidades
Por Franklin Cordero / El Caribe
SAN RAFAEL DE YUMA. Este municipio de la provincia La Altagracia lucha por un objetivo: conseguir que el Congreso incluya a Boca de Yuma en la reforma de la ley de áreas protegidas para que se puedan ejecutar proyectos turísticos que acaben con el desempleo.
San Rafael del Yuma no vive ya de la agricultura y su distrito Boca de Yuma, con riquezas históricas y costeras, sólo depende de una actividad pesquera reducida a 95 por ciento, según el presidente de la Asociación de Pescadores, Alfonso Bernard.
“Nuestra juventud se nos va. Los jóvenes son presa fácil de las drogas y la corrupción”, lamenta el líder religioso Ulises Ubiera.
Pero estas comunidades no se han cruzado de brazos. Efectuaron dos encuentros públicos con las autoridades municipales, del Gobierno y legislativas, quienes reconocen la necesidad de oportunidades y se han comprometido con aliarse a la causa.
Desde ya trabajan contra el reloj, pues si se aprueba el proyecto de reforma constitucional, sometido por el Ejecutivo, habría que esperar una nueva modificación de la Carta Magna.
“Ese proyecto establece dejar las áreas protegidas como están; necesitamos que nos incluyan en la modificación de la ley que se mueve en el Congreso”, sostiene Jorge Monteagudo, presidente del Comité para el Desarrollo de Boca de Yuma.
Hasta hace poco la situación era distinta. Todo cambió desde que se aprobó La ley 202-04, que modifica la 64-00 sobre Áreas Protegidas, la cual establece límites que ubica parte del poblado de Boca de Yuma dentro de la superficie del Parque Nacional del Este.
Al respecto, el historiador y empresario televisivo yumero, Néstor Julio Castillo, señala que esta segregación de parcelas favoreció a proyectos en Bayahíbe y perjudicó a Boca de Yuma, basado en que los legisladores de entonces prefirieron extender la superficie del Parque del Este hacia un vasto territorio de esa comunidad.
De hecho, 375,638 metros cuadrados del poblado, que abarca incluso hasta el área del liceo y el cementerio, forman parte de la zona protegida.
El apoyo de funcionarios
Sobre la crisis por la debacle en la producción agrícola y pesquera, las autoridades municipales, gubernamentales y legislativas reconocieron que la única salvación radica en que se le abra las puertas a la inversión turística.
Entre esos funcionarios figuran el síndico, Oscar Espinal; el gobernador de La Altagracia, Rafael Cedeño; el senador Germán Castro y los diputados Ricardo Sánchez, Guido Cabrera y Juan Julio Campos, y el representante de Turismo, Franklin René Berroa.
franklincorderop1@hotmail.com; franklincorderop@hotmail.es
