Ogro funcionario aeropuerto La Romana intenta agredir periodista Elpidio Tolentino
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LA ROMANA, República Dominicana.-Un grotesco funcionario del Aeropuerto Internacional La Romana-Casa de Campo promueve -contrario a la política de la empresa dueña de esas instalaciones- la no entrada de dominicanos por esa terminal aérea.
El ogro que no puedo ser identificado por su nombre, pero que la imagen acompaña esta nota, le fue encima con fines de agresión física al autor de esa crónica, periodista Elpidio Tolentino Garrido, por el hecho de que dicho ciudadano fue a recibir una de sus hijas que llegaba por ese aeropuerto.
Con expresiones amenazantes y pidiendo auxilio de agentes policiales (porque sabía que de hombre a hombre no podría), quiso ir encima nuestra, por lo que retrocedimos par de pasos para fotografiarlo en su acción violenta.
Actitud que le resultó sin mayores consecuencias porque algunas personas pudieron detener a tiempo a dos de mis hijos, mayores de edad y en plenitud de condiciones físicas, quienes estaban a su espalda y ya se preparaban actuar en contra del funesto sujeto, que al parecer entiende vivimos en los famosos 12 años del doctor Joaquín Balaguer.
En un área al aire libre, frente a un letrero de Aduanas, a pleno Sol de la tarde, donde se reciben los pasajeros, quise hacer una foto de mi hija al salir por la puerta, pero el individuo aparentemente nos identificó como periodista y pensó que estábamos descubriendo alguna acción fraudulenta suya o de su personal y quiso evitar la misma.
El Central Romana Corporation, que tantas informaciones nos ha suministrado y nos ha pedido ir a cubrir allí, hasta permitirnos subirnos en aeronaves y fotografiarnos en su interior y el propio interior de esas instalaciones, debe hacerle saber a ese troglodita y cavernario sujeto que una foto de un viaje es un souvenir que todos quisiéramos tener y que con ello no se atentará contra la seguridad de la empresa ni de su trabajo.
Las promociones para que se viaje por aquí no se compadecen con ese tipo de actitud, de un sujeto que evidentemente anda en algo malo y no quiere que se sepa, que se revise y piense bien a quien le levanta la mano, porque por eso han muerto muchos que no llegan a saber de que lado le llegó la muerto.
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